Hola a todos.

Durante esta semana varios me habéis preguntado que por qué ayuno, y por qué ayuno tanto tiempo.

Os voy a dar las explicaciones de por qué lo hago, y por su puesto, no intenten hacer esto en su casa, jajajaja. Yo simplemente cuento lo que hago, y lo que me funciona, lo que no me funciona también lo cuento, pero no todo.

Hace 3 años, cuando empecé a competir un poco más en serio, terminaba las carreras de 10 km destrozado, con ganas de vomitar y con descomposición. Lo daba como algo normal, por el esfuerzo, y por la intensidad a la que me obligaba.

Comentándoselo a un amigo, me dijo que por que no ayunaba un día a la semana, que podía ser por el hígado. No busqué más explicaciones, simplemente cuando me lo dijo, me encajó, y empecé a hacer ayuno.

El primer día, me costó, pensaba demasiado en la comida, ese día pasé hambre, pero lo aguanté. Pensaba que me iba a despertar al día siguiente con ganas de comerme una caja entera de cereales, pero no fue así, me despertaba con menos necesidad de desayuno que otros días.

Poco a poco, fui notando como el día de ayuno no me alteraba mi día a día, ya no se me hacía duro, y era capaz de hacer entrenamientos con normalidad durante ese día, y durante el día posterior.

No sé si por esto, o por otra cosa, pero ese año que ayunaba todos los martes, fue el año en el que mejor me encontré, y en el que mejores resultados tuve.

Dejé de hacer ayunos, me metí en el Mundo Ironman, y parece que todo es poco. Come todo lo que puedas, entrena todo lo que puedas, se intenso todo lo que puedas….

Este verano me ha hecho reflexionar sobre la batalla que he tenido los dos últimos años contra los Ironman, y he decidido volver a mis métodos, los que me funcionan.

Llevaba cosa de dos meses, en los que me encontraba cansado, fatiga constante, dormía mal, y me despertaba cansado, incluso durmiendo más de lo que duermo normalmente, y tenía dolores musculares y tendones, cosa que por suerte no suelo tener, y este domingo, tras una comida familiar, lo vi claro, quería ayunar, y quería ayunar lo que el cuerpo me pidiera, necesitaba una cura…, y así ha sido.

Una de las explicaciones que doy, es que cuando tienes u a comida copiosa, el cuerpo te pide echarte una siesta. Si llevas una temporada comiendo mal (todos, comemos mal aunque queramos comer bien, los alimentos están manipulados ;-)) el cuerpo tiene esa sensación constante de necesitar siesta, de no descansar, de no llegar….

Por otro lado, cuando te encuentras mal, tienes gripe, o estás enfermo, y no tiene por que ser de tripa…, el cuerpo pide no comer, parece que el no comer ayuda a recuperar el cuerpo.

Por estos motivos hago el ayuno, y a mi me funciona. Mucha gente me dice que no aguantaría ni saltarse una comida, pues que no se la salte, y que no haga ayuno.., no hay que enfrentarse a las cosas por que otro lo haga y te diga que es bueno, aquí no hay nada ni bueno ni malo, somos todos diferentes, y lo importante es que lo que hagas te ayude y te aporte.

Por otro lado, a mi me ayuda a desarrollar mi parte espiritual, no lo hago por perder peso, y más que una desintoxicación, lo considero una curación.

Para cualquier duda, a vuestra disposición 😉

Vaaaaamoooooosssss