Bueno si, lo primero que quiero es disculparme por llevar tantos días sin escribir. En el último mes he escrito bastante poco, pero es que llevo una temporada en la que estoy algo fuera de mi. Esas épocas en las que coger un boli te cuesta la misma vida, y cuando lo coges encima se te cae al suelo y se convierte en un auténtico drama…., pues así llevo cosa de un mes y medio.

Con la cabeza así pretendía llegar al Ironman de Gandía, una prueba en la que mucho es la cabeza y yo la llevaba tocada.

Desde las 7.00 de la mañana del domingo sabía que las cosas no iban a salir bien, más que nada por que al ir a hinchar las ruedas por la mañana, en la rueda de atrás había dos radios sueltos…., sabía que no iba a aguantar la rueda 180 km.

Aún así al agua, con la emoción de verme con amigos, Sali, Charly, Javier, familia, Celia, Cuñado, sobris, y muchos amigos y nervioso por el estreno de mi hermana.

Una vez en materia, cuando se dio la salida empecé a nadar, sin ninguna presión y sin prisa. Llevo 3 meses en los que no he nadado y en los que me ha sido imposible ir a nadar a las 22:00 a Rivas. He de decir que en este último mes y medio he vuelto a adelantar el horario del despertador, a las 4:00 de la mañana, para editar vídeos para http://www.thesportool.com, por lo que cuando llegan las 9:00 de la noche, me siento realmente incapaz de ir a nadar, y sobretodo sabiendo que si voy a nadar, a la mañana siguiente no me despierto a las 4:00 ni de coña.

La natación aún así, se me hace más llevadera de lo que esperaba, y salgo en 1:07, un tiempazo para mi.

Llega la bici, la cojo con ganas, sabiendo que algo va a pasar….

La primera vuelta se me da bastante bien, haciendo una media en la ida, en la que hay un poco de viento y falso llano por encima de 37, y volviendo a una media por encima de 40 km/h.

Empiezo la segunda vuelta y algo raro empieza a pasar, algo más de viento, y no aguanto la media, voy por encima de 35 todo el rato, pero hay un ruido en la rueda de atrás que me mosque. Empiezo a sudar mucho, y a tener más sed, tomo más geles, pero algo falla. Hago la mitad de la segunda vuelta por encima de 35 km/h, pero la vuelta que es favorable cada vez me cuesta más y cada vez el ruido de la rueda trasera es mayor. Lo que antes estaba haciendo por encima de 40 km/h ahora me está costando mantener a 38. De hecho me pasa uno de los que he adelantado antes y me confirma «vas frenado, se te mueve la rueda de atrás y te roza»…., joder, pero tanto…., la verdad es que pensaba que iba a ir frenado pero que podría acabar la bici y llegar a la Maratón, que era lo que más ganas tenía de hacer.

Lanzo la bici, dejo de pedalear y veo que a los pocos metros se para. Es imposible seguir. termino la segunda vuelta a una media de 36, pero soy incapaz de seguir, veo a Celia, y sé que no puedo seguir, decido abandonar.

A partir de este momento tristeza total, por no haber podido llegar a la maratón y demostrarme que estoy en un buen momento de forma de carrera a pie, como he podido demostrar este domingo, pero decir lo que hubiera pasado sin haber hecho los 60 km que me quedaba de la bici y sin haber hecho la Maratón, no tiene ningún sentido.

Así que a partir de ahora a entrenar, sin saber muy bien lo que va a ser de mi el año que viene, pero entrenando cada día con la única filosofía de entrenar por amor al deporte, y por que lo disfruto, no sé que carreras haré en 2015, pero si sé que mi objetivo es seguir disfrutando.

Gracias a todos por vuestro apoyo, me llega y mucho, GRACIAS CELIA, y gracias Sali y Carlos, os habéis salido, y no sólo en la carrera haciendo unos tiempazos,si no en el detalle que habéis tenido conmigo.

Enhorabuena Belén, anda que no te queda guerra por dar, iré a verte a Kona seguro 😉