Parece que esto es lo que necesitamos para relajarnos, no? Una buena taza de café o una buena infusión, o quedar con unos amigos para charlar…, en el fondo, lo que estamos buscando es evadirnos, salirnos de la rutina, de la normalidad, parar el tiempo.

En qué nos estamos convirtiendo para llegar a esta situación? Por qué esta necesidad de parar? Qué estamos haciendo si no estamos parados entonces? No es que no dejemos de movernos, es que no dejamos de tener ruido en la cabeza.

Y por eso la meditación…, meditación, yoga, rezar, budismo, correr, tomar café… llámalo X, en el fondo es todo lo mismo… parar el tiempo, para intentar volver a ser nosotros mismos, pero no el nosotros de ahora, lo que fuimos en nuestro origen.

Cómo explicar esto que digo? Cómo contarlo…??

Creo que el ser humano hubo un momento en el que fue un coche, con todos sus complementos y todos sus accesorios.

Poco a poco, fue quitando cosas del coche, por que pensaba que no lo necesitaba, para seguir funcionando, le quitó las ventanas, los espejos retrovisores, las puertas, los asientos, el salpicadero, los amortiguadores, el capó, las ruedas…., hasta que se quedó en una simple estructura…, pero esto no es un coche, aunque si se mueve si lo empujas, pero cuesta mucho.

En esto se ha convertido el ser humano, en una estructura vacía, con muchas capacidades pero que las ha perdido o las ha dejado escapar, pero estamos empezando a darnos cuentas, más que nada por el colapso en el que estamos viviendo, el colapso en el que vivir el ser humano…, en el que no para…, da igual lo que sea yo, una estructura, pero no me paro para pensarlo, no vaya a ser peor lo que vea que lo que vivo.

Aquí es donde aparece en escena la meditación, con sus derivados…,como decía antes, yoga, correr, tomar café, rezar…, y cualquier expresión en la que intentemos parar los pensamientos y volver a ser nosotros mismos.

Volviendo al ejemplo del coche…, estamos creando fábricas de ruedas, fabricas de asientos, de amortiguadores, de ventanas…., de todos los componentes del coche…, pero aún no estamos montando el coche…., el coche sigue siendo un esqueleto.

Debemos volver a creer en nosotros, y en nuestras posibilidades y capacidades innatas, no las innatas de nuestra vida, las innatas de nuestros orígenes, donde estábamos todos conectados, entre nosotros y con el mundo en el que vivimos y con unas posibilidades infinitas.