El sábado fue el duatlón Villa de madrid en la Casa de Campo, y allí que fui a participar, en otra prueba más, otro fin de semana.

El día amanecía nublad, y aunque me habían dicho el día anterior que iba a llover, pensé que a lo mejor, con un poco de suerte, aguantaba la mañana encampotada, pero no llovía, pero de eso, nada de nada.

Quizá lo que cuente os parezca exagerado, pero fue así como me sentí durante la carrera.

salí en bici de casa, tardo 20´ aprox en bici desde casa hasta la casa de campo, y como estoy tan justo de kilómetros en bici, decidí hacer unos poquitos hasta allí.
Justo de kilómetros en bici es ser bastante generoso, ya que desde el Half de Guadalajara en septiembre, sólo he cogido la bici para los 13 kilómetros del duatlón de Rivas, así que imaginaos como tengo las piernas para la bici.

Bueno, llego a la casa de campo, y malas noticias, ya está lloviendo, y hace frío, y viento…, día para sufrir mucho.

Intento calentar antes de empezar la carrera, pero imposible, no entro en calor, y casi a las 10.00 de la mañana empezamos a correr.

La primera vuelta de 2,5 km corriendo se me hizo dura, intentando entrar en calor, pero conseguí terminarla en primera posición. En la segunda apreté un poco más, para sacar diferencia a los perseguidores, sabiendo que las transiciones y la bici no iba a ser lo mío, y así fue.

Llego a la primera transición sacando 40 segundos al segundo, pero pierdo mucho tiempo en ponerme el caso, quitarme los guantes, poner las zapatillas de la bici…, horrible como siempre mis transiciones.

Empieza la bici, hay que subir tres veces garabitas, y en la primera subida ya veo lo duro que se me va a hacer.
En la bajada me pasa el segundo, en el llano conseguí aguantándole, sufriendo mucho por que tenía la cara helada, las manso sin guantes no las sentía, y la rueda trasera del ciclista que tenía delante me echaba barro y agua a los ojos.
Sufriendo mucho le sigo hasta que en garabitas me deja, segunda subida sufriendo, la hago sólo, y la tercera vuelta también, cada vez el circuito más peligroso, con más frío, más lluvia…, y sin sentir la cara ni las manos, horrible de verdad.

Llega a la segunda transición, y me coge un grupo mientras me quito el caso sin desabrochar por que con las manos heladas soy incapaz de quitarme el casco. Y para quitarme las zapatillas de la bici y ponerme las de correr me tengo que tirar al suelo.

Empiezo a correr y me doy cuenta de que no veo nada, veo borroso, y si levanto la cabeza me mareo, es del barro que tengo en los ojos, corro lo más rápido que el sector en bici me permite, ya que me ha vaciado por completo, y aguanto, aguanto hasta que a falta de pocos metros para la meta me pasa el tercer participante, y me quita la segunda plaza.

Al final tercero, en un día sufrido, sobretodo en la bici, donde salió a relucir el lamentable estado en el que m encuentro en la bici, pero que aún así pude hacer decentemente, por lo que cada vez más motivado, y sumando aunque sea poco a poco y en estas condiciones kilómetros a la bici.
Por su puesto, después de esto, a casa lloviendo y en bici.

Un día duro, pero muy muy feliz de mi progresión, y contento, pero eso siempre, con podio o sin él, pero la verdad es que subir tiene algo que mola.

Vaaaaamoooooooooooosssssssss