Desde que hice parte de la Madrid-Lisboa el año pasado, y viendo que este año daban la opción de hacerlo en solitario, no tenía ninguna duda en que mi intención era hacerla sólo.

Lo que por su puesto, no tenía contemplado era en hacerla en solitario.

Hice tarde la inscripción, y con un amigo que me iba a acompañar en algunas etapas. Tenía apalabrado el coche de apoyo, pero 3 días antes de la carrera se empezó a caer la organización, no mi amigo iba a venir a hacerme compañía en algunas etapas, no iba a tener coche de acompañamiento, así que empezaba la aventura.

Por su puesto no iba a renunciar a la carrera opero el objetivo cambió inmediatamente, ya no era llegar hasta Lisboa, si no ver hasta dónde podía llegar. Más se complicaba la cosa cuando el jueves por la tarde, la previsión del tiempo daba lluvias intensas a partir del sábado por la tarde.

Por lo menos conseguí a alguien que me llevará hasta la salida, gracias Pecos, por que por momentos me veía empezando la carrera desde mi casa. Y conseguí que alguien me guardara  una mochila con ropa para cambiarme, gracias Víctor y Ako.

La salida de esta carrera es espectacular, en el ambiente se palpa que es una carrera especial. La primera etapa es bastante cómoda, tuve la suerte de coincidir bastante rato con Jorge Estalella, qué buenos momentos.

Al final de la primera etapa, parada para cargar el teléfono y para comer, lo que la organización me daba por que no llevaba nada de geles ni comida (Andrés, me lo dejé todo en casa….)

Mientras estaba allí, vi cómo los que hacían la carrera sólos, llegaban, sus compañeros les daban bebida y comida y seguía…., así si…, veía que mi historia era complicada.

Cargué un poco más el teléfono, comí un poco más y a por la segunda etapa.

Esta etapa ya terminó de noche. Conocí a Miguel Angel, un gran tipo de Granada con el que iba a hacer las etapas nocturnas y su coche de apoyo me iba a llevar la mochila que por suerte encontré en el segundo avituallamiento.

Saliendo de la tercera etapa empezaba lo difícil, la noche, y 10 horas de noche por delante. La etapa 3 es muy dura y muy difícil además, se nos fueron casi 6 horas en hacerla, pero llegamos en tiempo de salir a la cuarta etapa.

Esta etapa es más cómoda que la anterior, y con la esperanza puesta en el amanecer. Miro la hora y veo que son las 4:00, me río al pensar que muchos días me despierto a esas horas, incluso que a lo mejor me suena el despertador, pero no, lo había quitado del móvil. A las 5:00 ya sólo pensaba que quedaban un par de horas para amanecer. Y a las 6:30, una última bajada chunga, en la que Miguel Angel y yo bajamos a pie un buen rato, hacia ver que estábamos cerca de la 5 etapa.

Pero no sabía lo que iba a pasar. De repente, a eso de las 7:00 y en una bajada de asfalto en la que íbamos rápido, Miguel Angel que va unos metros por delante, sale volando por encima de la bici y cae con la cara. Los primeros momentos son de mucho susto, de desconcierto, en seguida dice Miguel Angel que se ha partido el labio, pero se ha partido los dos, tiene el casco roto, y golpes en ceja y cabeza, la ropa rota, ha sido una gran torta.

Vemos que no hay nada roto, estamos cerca del avituallamiento, y tras estos minutos de desconcierto le digo si aguanta para ir en bici hasta el avituallamiento. Lo intentamos pero no puede. Llamo a la organización, enciendo el localizador, nos localizan y al rato llega la ambulancia, le atienden y me llama la organización, son las 8:00 más o menos y estoy fuera de carrera por que no llego al cierre de la estación, estaba previsto a las 7:30 aprox.

Aquí finaliza la carerra, una pena por que habíamos pasado la noche y teníamos 14 horas para hacer las dos siguientes etapas. Esto no quiere decir que fuera a llegar a Lisboa, pero si la 5 etapa la iba a empezar, y la 6ª yo creo que también, a partir de ahí iba a ser la cabeza la que decidiera, pero sólo y con lluvias, y sin el calor de alguien que te acompañe es difícil.

Fuimos al centro de salud y de ahí mandaron a Plasencia a Miguel Angel, a tenerle en observación y curarle.

A mi me vino a buscar Santi, quien hará conmigo la Madrid Lisboa en 2015 seguro.

Un 10 para la carrera y la organización, que siempre estuvieron atentos.

En menos de un año, vuelvo a esta carrera.

Vaaaaamooooooossss